1M- Día Internacional del Trabajo

La CNSE exige que se garantice igualdad de derechos y oportunidades para las personas sordas en materia de empleo

Reclama dar pleno cumplimiento del Real decreto 674/2023, de 18 de julio, por el que se aprueba el Reglamento que desarrolla la Ley 27/2007 con el fin de que las personas sordas disfruten de las mismas condiciones laborales que el resto. 

Derecho a acceder a los servicios públicos de empleo, a participar de cualquier proceso formativo y de apoyo a la actividad profesional, a la adaptación del puesto de trabajo, y a asegurar la igualdad de trato y la no discriminación son algunas de las exigencias de este colectivo.

Con motivo del Día Internacional del Trabajo que se celebra cada 1 de mayo, la Confederación Estatal de Personas Sordas (CNSE), ha exigido igualdad de condiciones laborales para las personas sordas en todo el territorio nacional.  “Queremos acceder al empleo en función de nuestras capacidades y decisiones personales y que no se nos encasille ni se nos juzgue sin conocernos”, apunta la entidad a través de un manifiesto. “Exigimos un mercado de trabajo en el que los derechos de todas y todos valgan lo mismo”.

En concreto, la CNSE reclama que se hagan efectivos los derechos en materia laboral que se contemplan en el Real Decreto 674/2023, de 18 de julio, por el que se aprueba el Reglamento que desarrolla la Ley 27/2007, con el fin de que las personas sordas “disfrutemos de las mismas oportunidades que el resto”.

Derechos laborales

Entre ellos, se destaca el derecho a acceder a los servicios públicos de empleo garantizando siempre la disponibilidad de servicios de interpretación, video interpretación, guía interpretación y mediación comunicativa en lengua de signos en las oficinas de atención al público.

También se reclama el derecho de las personas sordas a poder participar en condiciones de plena accesibilidad en cualquier proceso formativo ofrecido por el SEPE y por las empresas, y el apoyo a la actividad profesional contando con garantías de igualdad de trato y no discriminación.

Asimismo, la CNSE llama a la adaptación de los puestos de trabajo garantizando la comunicación y el acceso a la información a través de la lengua de signos y de aquellos medios técnicos que se precisen. “Con arreglo a las normas de la UE, las empresas deben ofrecer ajustes razonables a las personas con discapacidad de manera que se les permita solicitar un puesto de trabajo, realizar una formación, o desempeñar sus funciones y prosperar”, recuerdan.  

En esta misma línea, piden que las medidas de prevención de riesgos laborales “no limiten la ocupación de puestos de trabajo ocupados por personas sordas”, y que se modifique el Reglamento General de Conductores para que “se incluya la accesibilidad en lengua de signos en las pruebas de obtención de los permisos para conducir camiones y furgones”.

La entidad revindica que se ponga a disposición de las y los opositores sordos las herramientas necesarias para poder desarrollar las pruebas selectivas “sin que para ello se requiera un informe médico preceptivo”, y que “se bareme el conocimiento de la lengua de signos española y la catalana en el acceso al empleo público de este colectivo y en la provisión de puestos de trabajo con tareas de atención directa al público”.

Por último,  desde la Confederación insisten en que se reconozca, regule y promocione el perfil profesional de las y los especialistas en lengua de signos y se mejoren sus condiciones laborales: “Esta profesión constituye un importante yacimiento de empleo para la población sorda y, como tal, se debe proteger e incentivar”.